La incidencia de la diabetes en personas cada vez más jóvenes se incrementa cada año
Una alimentación poco adecuada y una vida sedentaria son las causas principales de que niños y niñas con tan sólo 12 ó 13 años sufran diabetes tipo 2. El sobrepeso se ha instaurado en nuestras vidas y parece llevar el mismo camino en niños de corta edad. No deja de resultar curioso que, medio mundo se muere de hambre mientras la otra mitad se muere por comer demasiado y demasiado mal. Hemos abandonado hábitos saludables y los hemos cambiado por otros que no sólo no son saludables físicamente sino que nos vuelven cada vez más perezosos, más apáticos, más dependientes
Hemos repetido y seguiremos haciéndolo que el secreto está en la prevención. No queremos vernos con un sobrepeso que derive en enfermedades, verdad? por qué íbamos a quererlo entonces para nuestros jóvenes? Por qué no hacemos algo antes de que empiece a ocurrir? Dónde está el problema? Nos hemos vuelto demasiado cómodos como para esforzarnos en que nuestros hij@s se alimenten bien? Dónde hemos perdido el control?
Estamos a tiempo, todavía, de evitar enfermedades cardiovasculares, diabetes y tantas otras. Si no hemos prestado atención hasta el momento, no es tarde, podemos retomarlo e intentar prevenir o en caso de que tengamos ya el problema encima, intentar que se mantenga dormido y nos permita una vida con la calidad que nos merecemos, así que hoy nos gustaría presentarte algunas pautas, de la mano de un hijo que, ya en edad universitaria, con un problema de diabetes, decidió que no quería seguir así, que tomaría acción y que intentaría mantener su diabetes dormida. Y sabes? Funcionó, así que, por qué no iba a funcionar con tus hij@s, contigo?
Quieres conocer las pautas que aplicó? Quieres saber en cuales de sus acciones habituales, en lo que se refiere a la alimentación, tomó acción para dormir su diabetes?
- Reducir la cantidad de sándwiches o aperitivos poco saludables. Cuando nuestros hijos empiezan en la universidad, con frecuencia “abandonan el nido” y deben buscar su propia rutina. La falta de costumbre, la falta de tiempo hacen que coman lo primero que se les ocurre y los bocadillos son una opción realmente socorrida. Igualmente, los snacks repletos de grasas, sal y azúcares suelen formar parte de su vida. Este fue el primer hábito que abandonó nuestro protagonista para intentar huir de la diabetes, cambiar esos snacks por fruta fresca, verduras frescas, chocolate negro
- Una parte esencial de la dieta de nuestro chico eran las harinas blancas, así que decidió cambiarlas por harinas integrales, pan integral, arroz integral, pasta integral. Esta fue una de las pautas que le ayudó realmente a controlar sus niveles de glucosa en sangre y por tanto su diabetes, pero fue además una ayuda inestimable para perder peso. Una reducción en el consumo de harinas refinadas es fundamental para vigilar la enfermedad y es realmente sencillo encontrar opciones saludables en la mayor parte de las tiendas que visitamos
- Como ayuda en su lucha contra la diabetes, Juan (nombre ficticio de nuestro protagonista) decidió que incluiría más frutas y hortalizas frescas en su dieta diaria, así obtendría las vitaminas y minerales que necesitase. Entendió además que podría elegir entre una gran variedad de alimentos y muchísimas formas de cocinarlos. Gran idea! Sus padres pueden sentirse realmente orgullosos! Al reducir las harinas refinadas e incrementar el consumo de fruta y verdura, ha logrado un cambio positivo en todos los aspectos, en cuanto a su salud en general, a la pérdida de peso y a la diabetes
- Y qué decir de las famosas “fiestas de estudiantes”? Cócteles rebosantes de alcohol, calorías vacías y bebidas azucaradas cuyo contenido en este veneno resulta aterrador. Qué tal sustituir estas bebidas por agua o refrescos que no contengan azúcar? De elegir alguna bebida con alcohol, quizás la menos mala de las opciones sea una copa de vino. Resulta mucho más fácil adaptarse a lo saludable de lo que creemos y les ayudará realmente a mantener la diabetes a raya o prevenirla
- Por último pero no menos importante decidió que aumentaría su consumo de agua. Juan había escuchado muchas veces lo importante que era beber agua pero ahora, que había decidido luchar contra la diabetes y el sobrepeso, pensó que, decididamente iba a ponerlo en práctica. Al principio le resultaba un poco difícil pero decidió que llevaría siempre agua consigo para tenerla a mano, en su escritorio, en la cocina, en el dormitorio, en la sala de estar…hasta conseguir beber 8 vasos cada día. Lo hizo de manera paulatina añadiendo, cada pocos días, un vaso, hasta llegar a su objetivo
Lo cierto es que Juan decidió que necesitaba un cambio en su vida, que quería vivir sin preocuparse por su diabetes y que quería dejar atrás su sobrepeso, así que tomó acción por iniciativa propia y su cambió fue radical. Su diabetes permanece “dormida”, su salud en general ha mejorado notablemente, su aspecto físico ha cambiado considerablemente y se siente increíble porque él solo ha conseguido su objetivo, se siente orgulloso de sí mismo, su familia también
Si te sientes como Juan, en un camino sin salida, haz lo mismo que él, toma acción, no lo pienses, hazlo! Tú también puedes conseguirlo!
Cargando ...
Deja una respuesta